Una de las últimas salidas de fin de semana que he realizado fue una visita a la Costa Brava, hace unas semanas os hablé de una de las zonas en las que estuve Cadaqués y el Cabo de Creús, esta ruta fue el sábado y hoy os traigo algunos de los tips de la zona que vistamos al día siguiente, un domingo con mucha luz.

Luz del Mediterraneo, en Begur, Playa Sa Riera. Costa Brava

Tras la ruta en Cadaqués fuimos a Figueras, en donde pasamos la noche, con un paseo nocturno por la rambla de la localidad y visita alrededor del Teatro-Museo Dalí finalizamos el día.
Figueras fue el punto de partida en la mañana del domingo para seguir con la ruta, la idea era continuar directamente por la costa, pero dejamos una visita al improvisto, cuando conduciendo por la carretera vimos el pueblo de Pals. A un lado el mar y al otro una pequeña localidad, abigarrada, de piedra, casi castellana, nos desvió la atención y la dirección.

Pals, en el bajo Ampurdán, conjunto arquitectónico. Detrás de la torre del reloj, a la derecha de la imagen, se pueden ver las Islas Medas, enfrente de la costa de Estartit y que forman parte de la sierra de Montgrí.

Con ganas de volver a ver la luz del Mediterráneo, en un domingo que se volvió especialmente luminoso, visitamos varías playas y calas paseando por distintas rutas, siempre, acompañados del agua del Mediterráneo. Llegamos hasta Begur y allí dos caminos, Sa Riera y Sa Tuna, visitamos los dos lugares. Dos pequeñas calas, inesperadas, con casas pesqueras en primera línea, nada de aglomeraciones, muy cálido, escaleras y callejones de casas blancas y ventanas azules...

Playa de Sa Riera, Begur, Costa Brava

El Balcón del Mediterráneo, torreón junto al Faro de San Sebastian, en la localidad de Llafranc